Desde que ambos países crearon un fondo binacional para el financiamiento de proyectos el 2008, la deuda de Venezuela a China alrededor de 40.000 millones de dólares No es novedad que cuando dos países establecen relaciones, ambos creen poder salir ganando tras el acuerdo establecido.
Los nexos se generan por intereses y necesidades. Tampoco es novedad que un país prefiere callar ante las injusticias de su proveedor o cliente para mantener una “buena” relación. Ejemplos como los de hoy abundan: todos los países de Mercosur decidieron ser indiferentes ante la situación país que vive Venezuela.
Las relaciones entre Venezuela y China datan desde el 28 de junio de 1974. El año pasado se celebraron 40 años de vínculo. Estos intercambios han cubierto todos los ámbitos: educativo, cultural, tecnológico, económico, político, militar, geopolítico, entre otros. En los últimos 15 años, las relaciones se han fortalecido. Desde que la llamada Revolución Bolivariana liderada por el ex-presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, el nexo entre ambos países ha ido incrementando comparado con el pasado.
China se ha convertido en el segundo socio comercial más grande de Venezuela y Caracas ocupa el puesto número cuarto entre los socios de Beijing, capital de China. De 1974 al 2005, se registró un inmenso ingreso en el comercio bilateral, yendo de 1,4 millones de dólares a 2.141,8 millones; entre los cuales, la exportación China hacia Venezuela fue de 907,8 millones de dólares y la de Venezuela hacia China, 1.234 millones de dólares.
En el 2012, 15% de las exportaciones venezolanas fueron absorbidas por el mercado chino, mientras que el 17% de las importaciones del Gobierno de Chávez proveyeron del Gobierno de Hu Jintao. Ese mismo año, Venezuela recibió un financiamiento por parte de China de 36 millardos de dólares, lo que suma una cifra total en el comercio bilateral de 23 millardos de dólares el 2012, cuando en el año 2000 fue de 350 millones de dólares.
Las inversiones de China a Venezuela han ido desde lo tecnológico (China suministró el primer satélite a Venezuela, el 2008, llamado Venesat-1 Simón Bolívar) a lo cultural, desde la ciencia hasta los estudios. Venezuela ha ido pagándole a China exportándoles barriles de petróleo. El 2013, Venezuela exportó 626.000 barriles diarios a China. China también ha cooperado en materia de infraestructura: construcción de ferrocarriles, tres plantas energéticas que estarán listas para el 2016, que beneficiarán a más de 30 millones de habitantes, según cifras oficiales. Sin embargo, la deuda a China supera los 50 millones de dólares. El precio del petróleo se encuentra en $52,61. Para este año, se espera que las exportaciones de petróleo a China alcancen el millón de barriles. Ahora, si a China se le paga en barriles de petróleo, la deuda con China crece cada día más, hoy en día Venezuela importa 98% de los productos; ¿qué gana Venezuela con estas relaciones? Recientemente, China le otorgó a Venezuela otro préstamo de $5 millones de dólares del Fondo Chino, el cual es un medio creado el 2007 para financiar los proyectos de Venezuela y así no caer en la deuda. Eso suma, en total, 50 millones de dólares en deuda a China.
El economista José Guerra afirma que, ante todo, estos préstamos de China a Venezuela son ilegales ya que, según la constitución, el Parlamento debe aprobar dicho acuerdo antes de que se establezca. Segundo, el profesor de la Universidad central de Venezuela (UCV) asegura que “No existe información sobre las condiciones de esa deuda, los intereses que se tienen que pagar, cuánto petróleo se envía a China o para qué se utilizan esos recursos”. Añade que la deuda con China supera las reservas internacionales del país, lo cual hace impagable esta deuda. El gran perdedor en estos tratados es Venezuela, el endeudamiento con China crece cada día más. El economista Francisco Faraco dice que “nos entregamos a China, tendremos que aprender a hablar mandarín”, refiriéndose a que la deuda es tan inmensa, que Venezuela económicamente le pertenece a China.
Archivo Cortesía de: Carlos Contreras.
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